Nuevo año, nuevo mercado inmobiliario español
A finales de 2019, el euríbor bajó hasta el -0,261 frente a su situación de -0,129 del año anterior.
El Euribor, o tipo de oferta interbancaria en euros, es un tipo de referencia que se construye a partir del tipo de interés medio al que los bancos de la zona del euro ofrecen préstamos a corto plazo no garantizados en el mercado interbancario. El cambio a la baja supuso un descenso de las cuotas para los titulares de hipotecas en España. El euríbor no había dejado de subir desde que cayó en negativo a principios de 2016 como consecuencia de la política de flexibilización cuantitativa del Banco Central Europeo.
Los notarios españoles están informando de un aumento de las solicitudes de hipotecas y parece que los préstamos pueden estar en camino de aumentar después de la interrupción causada por la introducción del verano pasado de la legislación introducida con la intención de proteger a los titulares de hipotecas. Una política que, de hecho, dificultó que los compradores de viviendas obtuvieran una hipoteca.
Las cifras muestran que el número de hipotecas residenciales firmadas en España durante octubre de 2019 fue de casi 24.300, lo que supone un aumento de más de 8% en términos interanuales y continúa una tendencia al alza de tres meses consecutivos. Sin embargo, el importe medio prestado para la compra de una vivienda se redujo en casi 4% respecto al año anterior, situándose en algo menos de 132.500€.
El año 2020 también puede ver el mercado de la vivienda en España afectado por un nuevo Gobierno. Elegido en diciembre de 2019, la alianza gobernante ya se ha comprometido a abordar la cuestión de la vivienda asequible en España. Las políticas de la coalición entre los socialistas de centro-izquierda, liderados por Pedro Sánchez, y la izquierda dura de Podemos pueden desanimar a los potenciales inversores extranjeros que habrían preferido un giro a la derecha.
Las exenciones fiscales para las sociedades de inversión inmobiliaria (SOCIMIs) serán un probable objetivo de revisión, y las estructuras empresariales para la inversión inmobiliaria no serán fomentadas por la nueva coalición de izquierdas. Podemos también quiere imponer el control de los alquileres y regular los alquileres turísticos, aunque no todos sus cambios propuestos cuentan con el apoyo del parlamento en su conjunto.
También se puede argumentar que, en el caso de los controles de alquiler previstos por el nuevo Gobierno, hay poco que no esté ya legislado a nivel regional, lo que significa que el Gobierno nacional tendrá un poder insignificante para cambiar el sistema de alquiler vacacional en los lugares donde es más lucrativo, como las Islas Baleares.
El nuevo año será testigo de algunos cambios que van a afectar al mercado inmobiliario español y a su economía en general. Parece que el auge de la inversión extranjera de la última década se verá sometido a las turbulencias derivadas de los cambios en el clima político y los precios de la vivienda podrían sufrir un deslizamiento hacia un nivel más realista.
Sin embargo, el cambio en el tipo de interés del Euribor será beneficioso para los compradores a corto plazo, ya que los prestatarios que ya tienen hipotecas españolas variables basadas en el Euribor habrán visto caer sus cuotas. En un préstamo típico de 120.000 euros a 20 años, se ahorrarán unos 7 euros al mes. El resultado de esto será un mercado más favorable para los compradores, ya que los inversores con buen crédito podrán negociar mejores ofertas en 2020.